EDITORIAL: Solidaridad
En momentos difíciles como los que estamos viviendo, las personas deben solidarizarse con el prójimo, y más aún, los gobiernos de turno de cada país, sirviendo a sus ciudadanos con la dotación de alimentos, agua, electricidad y todo lo básico para poder sobrevivir ante la adversidad.
La situación se torna cada vez más difícil para la gente necesitada, es decir los pobres, ya que muchos de ellos viven el día a día vendiendo productos en la calle, y esta cuarentena les está afectando mucho para el sostenimiento de sus familiares.
Ya el Gobierno ha puesto en marcha la campaña “Honduras solidaria” la cual está encaminada a donar vivieres a los barrios más necesitados de la ciudad. Pero esto no será suficiente ante la fuerte demanda de productos de subsistencia, ya que la población pobre es cada vez más numerosa.
Honduras requiere de solidaridad. Los políticos que por años se han estado peleando por un puesto, muchos de ellos han desaparecido del ambiente popular. Los candidatos a la presidencia, solo gastan su energía en despotricar al Gobierno de turno, pero no se les ve una determinación en ayudar a su pueblo. No tienen solidaridad. ¡No hay unidad!
La solidaridad también debe verse reflejada en la ciudadanía, en ayudar en lo que más se pueda a aquellas personas que están pasando por problemas difíciles. En estos días también se ven personas pidiendo en la calle o limpiando los parabrisas, y ante tanta indiferencia, no se les da ni siquiera un lempira, por el trabajo realizado.
Estos son momentos para hacer cambiar la mentalidad y ejercitarse en la solidaridad, ante esta circunstancia tan difícil. En el año 1998 cuando azotó el huracán Mitch, se decía que este fenómeno llegó para cambiar la mentalidad del hondureño. En un momento se vio que todo el pueblo se unió ante la adversidad, pero después todo se esfumó. ¿Llegaremos a un punto en que esta crisis nos cambiará la forma de pensar y ser más solidarios?