Expresidenta de Bolivia estable luego de que su familia denunció que intentó «quitarse la vida»
Actualiza con visita de representante del Alto Comisionado de ONU para los DDHH y declaraciones del sindicato médico
La salud de la expresidenta de Bolivia Jeanine Áñez se encuentra «estable» este domingo, después de que, según sus familiares, intentara «quitarse la vida» el sábado en la cárcel donde está recluida, informaron autoridades penitenciarias.
«Podemos decir, categóricamente, que su estado de salud es estable. Al momento se encuentra con su familia en el centro penitenciario. La familia va a ser un factor importante para recuperar el estado anímico» de la expresidenta, declaró Juan Carlos Limpias, director de Régimen Penitenciario, en conferencia de prensa.
Áñez atentó contra su vida por una «depresión severa» debida a su prolongado encarcelamiento, explicó su hija, Carolina Ribera. Uno de sus abogados dijo que era una forma de enviar «un mensaje de ayuda, de auxilio y de socorro».
El ministro de Gobierno (Interior), Eduardo del Castillo, aseguró el sábado que Áñez «habría pretendido (…) generarse una autolesión» y que tenía «pequeños rasguños en uno de sus brazos».
La exmandataria interina, de 54 años, encarcelada preventivamente desde hace cinco meses, es acusada en tres procesos diferentes de genocidio, terrorismo, conspiración, resoluciones contrarias a la Constitución e incumplimiento de deberes durante su gestión presidencial de un año (2019-2020).
Yulia Babuzhina, representante de la oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, visitó este domingo a Áñez en la prisión de mujeres, pero no formuló declaraciones sobre su salud.
«La Administración Penitenciaria ha aceptado que un familiar se quede a pernoctar todas las noches acompañando la recuperación de la señora Áñez. Anoche su hijo la estuvo acompañando», detalla por su parte un boletín entregado a la AFP por el Ministerio de Gobierno (Interior).