Policía de Nicaragua acusa a obispo de intentar organizar «grupos violentos»
La Policía Nacional acusó al obispo nicaragüense Rolando José Álvarez Lagos de intentar «organizar grupos violentos», supuestamente «con el propósito de desestabilizar al Estado de Nicaragua y atacar a las autoridades constitucionales», y se ha iniciado un proceso de investigación con la finalidad de determinar la responsabilidad penal.
Álvarez, obispo de la diócesis de Matagalpa (norte), se encuentra recluido desde el jueves en el Palacio Episcopal, que está sitiado por fuerzas especiales de la Policía, que no lo dejan salir junto a seis sacerdotes y a seis laicos.
La institución señaló en una nota de prensa que «las altas autoridades de la Iglesia católica» en el departamento de Matagalpa, «prevaliéndose de su condición de líderes religiosos, utilizando medios de comunicación y redes sociales, están intentando organizar grupos violentos».
Según la Policía, el alto jerarca estaría «incitándolos» a esos «grupos violentos» a «ejecutar actos de odio en contra de la población, provocando un ambiente de zozobra y desorden, alterando la paz y la armonía en la comunidad, con el propósito de desestabilizar al Estado de Nicaragua y atacar a las autoridades constitucionales».